A partir de las medidas de confinamiento de la población, y su menor circulación en las calles, algunos paisajes empiezan a tener nuevos actores. En este caso, en el puerto de Mar del Plata, los lobos marinos se animan a andar por la zona.
En los últimos días, circulan videos y fotos de los mamíferos apostados en las calles y veredas de la banquina marplatense, en una nueva postal que depara la cuarentena.
La aparición de los lobos marinos en zonas habitualmente insospechadas para ellos, se suma a los casos de los pequeños ciervos que aparecieron en Oberá, Misiones, o los patos del parque San Martín de Salta, que caminaron por las calles céntricas.
En otros lugares del mundo se observaron fenómenos similares, como las cabras que se decidieron a caminar por las calles de Llandudno, en Gales, o los distintos animales en peligro de extinción que fueron vistos en las playas y hoteles de México.
