Guillermo Montenegro juró este martes en el Concejo Deliberante como nuevo intendente de General Pueyrredon, y en su discurso de asunción dio a conocer las líneas de lo que será su gestión.
En tal sentido, Montenegro adelantó que su administración va a esta basada "en la transparencia y el diálogo", remarcando que "cada problema real demandará soluciones concretas".
Con respecto a quienes serán sus funcionarios, destacó que personas "honestas e idóneas", que en su gran mayoría se formaron en las universidades públicas nacionales, y que su intención es que pasen más tiempo "con los vecinos y menos tiempo encerrados en su despacho".
Montenegro aseguró que su idea es desarrollar "las mejores propuestas, las cuales delineamos tras escuchar a los vecinos".
Un capítulo importante de su discurso lo ocupó la problemática de la planta municipal, al sostener que la comuna "no aguanta más capas geológicas", por lo que adoptará como mandato que "cada funcionario que ingrese bajo mi gestión, se irá cuando yo me vaya".
En cuanto a la situación actual del municipio, Montenegro fue claro al sostener que "partimos de una situación compleja, y para resolverla es necesario escuchar y hacer más".
"Tenemos que empujar para sacar a Mar del Plata adelante", aseveró, puntualizando además que "la seguridad va a ocupar un lugar central".
Montenegro también confirmó que a partir del 1 de enero, será restituida la bonificación a los docentes municipales: "la bonificación docente es un derecho que nunca debió ser recortado del salario de los docentes", enfatizó.