"Merezco lo peor": Asfixió a su hijo de cuatro años con una bolsa y evitó la cadena perpetua

La Justicia condenó la mujer a 13 años de prisión ya que consideró como atenuante su estado emocional por la pérdida de otro bebé.

La mujer fue condenada a 13 años de prisión.
La mujer fue condenada a 13 años de prisión.

Una mujer cordobesa estaba acusada por el homicidio de su propio hijo, pero logró evitar la cadena perpetua ya que la Justicia de Córdoba consideró -luego del juicio que finalizó este lunes en la Cámara 5º del Crimen de la ciudad- como atenuante su estado emocional por la pérdida de otro bebé.

Todo se conoció el viernes 9 de junio de 2017, esa noche Paola Cuartara informó a la Policía que había matado a su propio hijo. "No doy más, maté a mi hijo Luciano de 4 años", dijo la mujer, según informó La Voz.

Pero el hecho había ocurrido cinco meses antes. En ese momento Paola tomó uno de los cordones de las zapatillas de Luciano, le ató las manos y le colocó una bolsa en la cabeza hasta asfixiarlo. 

Si la joven no hablaba, el cuerpo de Luciano jamás hubiera sido encontrado. Lo había ocultado en una tapera ubicada en la zona rural de la ciudad de Pilar, en el Gran Córdoba.

Con todo esto, Paola llegó a juicio acusada de homicidio calificado por el vínculo, que prevé la máxima pena. Para el fiscal Fernando Amoedo, que había pedido una pena de 8 años de cárcel –el mínimo de la pena para estos casos–, también existieron circunstancias especiales de atenuación.

Finalmente, la mujer que se negó a defenderse y repetía que "merecía lo peor", recibió la condena a 13 años de prisión por considerarse que actuó bajo "circunstancias extraordinarias de atenuación".

Amoedo en su alegato señaló que al momento del homicidio la mujer atravesaba una "profunda" depresión por la muerte de otro hijo, un bebé de 6 meses que falleció de muerte súbita.

"Tenía una idea de culpa excesiva por la muerte de su bebé y se consideraba una mala madre. Fue mala madre con uno que se le murió y, para no ser mala madre con el otro, lo mató", declaró el fiscal.

Aún así una vez conocida la sentencia los abogados defensores de Paola declararon estar "parcialmente" conformes con la condena de 13 años de prisión. El abogado Juan Pablo Bastos había pedido la absolución de su clienta, por considerarla inimputable.

De acuerdo a lo que surge en el expediente, Cuartara padece un leve retraso mental y creció en un contexto familiar marcado por la violencia y el abandono.