Violencia de género: qué canciones populares la han naturalizado

En el Día de la Mujer, una especialista realiza un análisis sobre aquellas melodías que cantamos sin tener en cuenta que hacen apología de la violencia, en todas sus formas.

Canciones populares que haccen apología de la violencia de género.
Canciones populares que haccen apología de la violencia de género.

¿Quién no tarareó alguna canción sin prestar demasiada atención al mensaje que intentaba dejar su letra? Un momento de diversión en un casamiento, ese instante sublime en el recital de tu banda preferida o simplemente un espacio de distracción del que, cuando se toma real dimensión de lo que esas canciones transmiten, deja el sabor amargo de la culpa o el remordimiento.

Si hacemos un repaso por distintas melodías, de los géneros más diversos (el tango o el reggaeton son pioneros) siempre estará aquella que contenga mensajes que reflejan algún tipo de violencia hacia la mujer.

No se trata de estigmatizar a un género musical determinado sino de cambiar la mirada hacia la mujer. Cómo se la entiende, su rol, su comportamiento, su imagen, los estereotipos, su relacionamiento amoroso y la violencia que se ejerce en su contra.

La doctora Ileana Oliva de Blaser es Jueza de Paz de La Calera y en su afán por estar siempre atenta a la problemática de la violencia de género realizó un interesante trabajo en el que se tomó la tarea de analizar letras del cancionero popular, entre ellas, el cuarteto y el rock nacional.

"Estaba elaborando mi trabajo final del postgrado en violencia de género interdisciplinaria, en el Poder Judicial, y pensé en encabezarlo con una canción. La primera que se me vino a la mente fue Casi la mato (La Barra), pero me di cuenta que hay muchas que encierran un mensaje machista y surgió la inquietud de trabajar en esta temática", indica la especialista a Día a Día + Vía Córdoba.

(…) Fuimos felices hasta el día de su engaño

Casi la mato señor juez

No me arrepiento es la verdad (…)

(…) Le disparé sin importar si moría.

Casi le mato y cien mil veces más lo haría (…)

(…) Por eso señor juez si salgo en libertad Le juro que esta vez la mataré (…)

“La letra es demasiado contundente y surge lo que hoy denominamos femicidio (la muerte de una mujer en manos de un hombre cuando existe violencia de género). Se advierte la cosificación, la ‘necesidad’ de cuidar de la mujer como si ella no pudiese hacerlo por sí sola, la posesión y ostentación”, agrega la doctora.

Pero la violencia física no es la única que está presente en las canciones. También lo hacen la violencia económica, emocional y psicológica.

"En Madre Soltera (Carlos La Mona Jiménez) vemos a una mujer que sufre todo tipo de violencia en un estadio especial de su vida, como es la maternidad. El abandono es parte de la violencia que se ejerce contra las mujeres, incluso culpabilizándolas de los embarazos (la canción remarca Él se enfureció con la noticia… le dijo es tu culpa, yo me voy; y le dio la espalda)", remarca Oliva.

El uso del lenguaje

El lenguaje no es neutro y las letras de canciones no son una excepción.

(…) cuando venís pal baile empezás a provocar

Te haces la carteluda y en la pista terminás

Con tu ropa ajustada y la colita bien parada

Los wachos que se agitan y las palmas se te hará

Que suba al escenario, que suba ya a bailar

"En esta canción de Damián Córdoba es una de las tantas en las que se reflejan las concepciones respecto a la mujer. Es una turra porque usa tal o cual ropa, o tiene determinado cuerpo. La mujer tiene el derecho y la libertad de vestirse a su gusto, sin que su atuendo o modales sean motivo para etiquetarla", analiza la jueza.

Y continúa: “En muchas canciones, dentro del género del cuarteto o del rock nacional, se toma a la figura de la mujer como una posesión del hombre. En las denuncias de violencia familiar y género, las frases que pronuncian los agresores son ‘si no sos mía no sos de nadie’ y en distintas canciones se refleja este concepto de posesión, egoísmo y capricho”.

El concepto de posesión forma parte del amor romántico patriarcal y a muchas mujeres, víctimas de violencia, les resulta muy difícil desprenderse del hombre violento, porque con el discurso de protección y cuidado, han terminado en situaciones de dependencia.

“Las letras del rock argentino también están tatuadas en nuestras relaciones, solemos dedicarlas y nos son dedicadas como canciones de amor. La idea de amor romántico ha atravesado muchas generaciones y el romanticismo estuvo siempre ligado a ideas de control, de sumisión, dependencia, abnegación, obediencia y entrega absoluta. Proponemos un amor asociado a la idea de colaboración entre pares, el respeto mutuo, la confianza, el crecimiento personal, el afecto y el placer”, cierra la doctora.