No había llegado el primer minuto de juego y Argentina ya caía 1-0, las ilusiones se destrozaban y Naranja seguía sin poder construir un potrero. Justamente este martes la empresa había redoblado la apuesta "un gol por minuto" la cuenta comenzaba a correr desde que Argentina marcara un gol.
Todo eso cambió cuando el astro Lionel Messi decidió frotar la lampara, cargarse una vez más el equipo y empatar el partido con un golazo, a los 12 minutos del primer tiempo.
La cuenta por los potreros comenzó a correr y como mínimo Naranja tendrá que construir 78 potreros. Todo depende de cuántos minutos se jueguen en el partido, ya que hay que tener en cuenta el tiempo de adición.
Desde la empresa también festejaron los goles.
