Investigadores de la Universidad de Stanford, en Estados Unidos, crearon el primer mapa de la desigualdad de la actividad, que muestra la brecha que hay entre los países con los habitantes más activos y los más sedentarios del mundo. El estudio no tiene precedentes y es el más completo en registrar cuánto ejercicio realizan las personas de todo el planeta.
Concretamente, el planisferio permite ver la cantidad de pasos que los habitantes de los diferentes países realizan por día. Esos datos fueron extraídos de la información anónima de los usuarios de la aplicación Argus, que registra en el celular la actividad física.
De ahí surge entonces la desigualdad de la actividad, un indicador similar al que se aplica por ejemplo en el salario, que permite registrar la brecha entre los niveles más altos y los más bajos. Así, cuánto mayor es la desigualdad en el nivel de actividad, mayores son los niveles de obesidad en ese país.
El trabajo también detectó que los entornos urbanos están asociados con una menor brecha de género en la actividad y menor desigualdad de la actividad. En las ciudades más transitables, la actividad es mayor a lo largo del día y a lo largo de la semana, a través de los grupos de edad, sexo e índice de masa corporal (IMC), con los mayores incrementos en la actividad de las mujeres.
Los números
Se estudiaron 111 países, con foco en las 46 naciones donde había más de mil usuarios de la aplicación. En base a esas conclusiones, los científicos pudieron establecer la desigualdad de la actividad en el resto del mapamundi. Esa diferencia, en tanto, es capaz de predecir la obesidad.
De hecho, los individuos de los cinco países con mayor desigualdad de actividad son 196% más propensos a ser obesos que los individuos de los cinco países con menor desigualdad de actividad.
Según la investigación, los datos de actividad física a gran escala revelan una marcada desigualdad en la actividad mundial. Hong Kong es el país más activo, con 6.880 pasos al día, mientras que Indonesia es el más sedentario, con 3.513 zancadas diarias.
Argentina, en tanto, está en el puesto 61 en orden creciente (los que menos a los que más caminan), con 4.852 pisadas por día, cifra que no alcanza la media total, que es de 4.961.
Los científicos que realizaron el trabajo aseguran que este mapa puede ser una herramienta para explicar los patrones de obesidad y, a partir de ahí, articular medidas para combatirla.
Sobre estos resultados, Andrea Miranda, directora de la Sociedad Argentina de Estética y Nutrición Integral (Saeni), opinó que los números no son ningún motivo de orgullo. "Sobre todo si tenemos en cuenta que en Argentina el 60% de las personas presenta sobrepeso, y estas cifras van en aumento", remarcó la especialista.
Cuestión de género
Los investigadores descubrieron además que esta inequidad es también de género, puesto que confirmaron que los hombres caminan más que las mujeres. Lo que sorprendió a los académicos fue que cuando la desigualdad de la actividad es mayor, la actividad de las mujeres se reduce mucho más dramáticamente que la actividad de los hombres.
Al respecto, Miranda recordó que en Argentina son más los casos de mujeres con obesidad. “Son las mujeres quienes suelen canalizar sus emociones a través de la comida. Eso puede explicar que en nuestro país sean más los casos de mujeres con obesidad, por sobre las cifras registradas en hombres” agregó.
La nueva epidemia
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 1.900 millones de adultos en el mundo tienen sobrepeso u obesidad.
Unos 41 millones de niños menores de 5 años padecen la misma enfermedad.
El principal responsable de este problema es el desequilibrio entre las calorías consumidas, que son mayores a las necesarias, y las calorías gastadas, que son insuficientes.
Las personas consumen cada vez más alimentos y bebidas con alto contenido en grasas y azúcar, y tienen una actividad física más reducida.
Cada año, más de cinco millones de personas mueren por alguna causa relacionada con la falta de ejercicio.
RECOMENDACIONES
» Caminar al menos 30 minutos por día mejora la actividad cardiovascular, ayuda a mantener el peso y canaliza tensiones.
» Con este simple ejercicio diario, se previene y reduce la hipertensión arterial, la diabetes tipo 2 y el colesterol alto.
» La falta de exposición solar, como consecuencia de las bajas temperaturas, disminuye los niveles de producción de serotonina, un neurotransmisor que está asociado al bienestar. Esa deficiencia se suele reemplazar con comida.
» Elegir una actividad física que agrade y recree en esta época del año.
» Los ejercicios más aconsejados para perder calorías son los aeróbicos. Caminar, correr, trotar, nadar o el spinning son algunos ejemplos.
» Dormir bien, entre 6 y 8 horas diarias.
» Mantener hábitos de alimentación saludable.
Los datos de los smartphones de 717.527 personas en 111 países revelan variabilidad en la actividad física en todo el mundo.