Durante la madrugada la Policía de la Ciudad se tiroteó con delincuentes que habían robado un auto. Durante el intercambio de disparos, Claudia Ovejero, una vecina de 451 años que tomaba mate en la vereda de su casa, recibió un disparo en la cabeza y, más allá de haber sido atendida por el SAME, murió en el Hospital Argerich.