Un estudio revela la razón científica por la que no es tan malo ser un vago

Si bien la vagancia siempre estuvo relacionada con la falta de incentivos, parece que la pereza tiene relación directa con el coeficiente intelectual. 

Ser un vago.
Ser un vago.

Siempre se ha vinculado a la vagancia y la pereza con falta de incentivos, de deseo. Pero ahora un nuevo trabajo científico indicó que hay otros motivos que explican este tipo de comportamiento.

Un grupo de científicos estadounidenses de la Universidad de la Costa del Golfo, Florida, investigó entre la relación existente entre no hacer actividades físicas y el coeficiente intelectual.

Para esto, realizó un examen a un gran número de estudiantes. Seleccionaron a 30 con un coeficiente intelectual elevado y tendencia a pensar demasiado, y a otros 30 con un coeficiente intelectual más bajo y que se caracterizaban por preferir las actividades físicas.

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