En la segunda semifinal de la Copa del Mundo, Croacia le ganó 2-1 a Inglaterra en el estadio Luzhniki de Moscú y se las verá con Francia en la final, que se jugará el domingo en el mismo escenario.
Kieran Trippier no dio tiempo a que los espectadores se acomoden en sus asientos. Antes de que se cumplan los cinco minutos de juego, el lateral pateó un perfecto tiro libre que se colgó del ángulo izquierdo del arco croata.
Durante todo el primer tiempo, Croacia intentó reaccionar, pero con la ventaja en el bolsillo Inglaterra no se lo permitió. A los 18 minutos, Perisic remató al arco desde fuera del área, pero la pelota se fue cerca del palo izquierdo.
También en la primera parte, los ingleses tuvieron la chance de estirar la diferencia en los pies de Kane, que pateó dos veces al arco pero en las dos oportunidades se encontró con el arquero Danijel Subasic.
Con este partido, Luka Modric se adjudicó un nuevo récord: llegó a los 11 partidos mundialistas e igualó la marca de Dario Simic.
Ya en el segundo tiempo, el equipo croata salió decidido a dar vuelta la historia, y a los 22 minutos llegó el empate. Sime Vrsaljko metió un centro desde la derecha e Ivan Perisic anticipó a su marcador, Kyle Walker.
En el alargue, Croacia no demostró su cansancio y lo fue a buscar desde el primer minuto. Pero Inglaterra no cedía.
En la segunda parte, llegó el momento histórico. Mario Mandžukić no dio por perdida una pelota en el área rival y apareció para marcar el 2-1 que coloca a su equipo por primera vez en la final de un Mundial.