En los últimos meses, la suba del dólar se trasladó a los precios y, por tal motivo, se estima que la inflación de junio supere el 3%, según estimaciones de consultoras privadas.
El aumento en las tarifas del transporte, la suba en los combustibles y la devaluación de mayo comandaron la suba generalizada. Teniendo en cuenta que la inflación núcleo no toma los servicios públicos, habría una aceleración de hasta el 3,5%, superior al 2,1% de mayo.
"Para junio tenés tres frentes complicados que podrían llevarla hasta un 3,5% o 4%, con un aumento núcleo de entre 3,8 y 4%. Se trata de la suba en naftas del 5%, alzas en transporte e inflación en alimentos hasta del 4% a partir del 'arrastre' que dejó mayo. Y a eso se suma la devaluación", analizó Federico Furiase, socio de la consultora EcoGo, en diálogo con TN.
Por su parte, la economista Nuria Susmel, de la Fundación FIEL, brindó su parecer en TN: "Buena parte del incremento de este mes tiene que ver con el dólar que se trasladó a los precios, además de transporte y combustibles".
El Banco Central reconoció este martes que hubo una aceleración de la inflación en junio y que eso fue determinante para no cambiar la tasa de interés -mecanismo por el que buscan sacar pesos en circulación-.
En tanto, el Gobierno cambió las metas de inflación por el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y admitió que será de 27%. La meta para el 2019 es de 17%.
