Luego de que familiares de Alberto Nisman pidieran el martes que se le prohibiera la salida del país a Diego Lagomarsino, el juez Julián Ercolini ordenó que se le coloque una tobillera electrónica con GPS.
El magistrado le pidió al Ministerio de Justicia que arbitre los medios para aplicar la medida, y solicitó que el de Seguridad que esté a cargo del control. Asimismo, dispuso que Lagomarsino se presente cada 15 días en el juzgado y que notifique si se va más de 100 kilómetros.
Por otra parte, el fiscal Eduardo Taiano advirtió a Ercolini que Lagomarsino, citado a indagatoria como sospechoso por la muerte de Alberto Nisman, podría obstruir la investigación de la muerte del ex titular de la UFI AMIA.
"Si bien como desarrollé a lo largo de este dictamen por el momento no se cuenta con elementos firmes que permitieran asegurar que Diego Ángel Lagomarsino prestó funciones para algún servicio de inteligencia, lo cierto es que sí existen firmes indicios que lo posicionan como, al menos, cercano a miembros de éstos. Dicha circunstancia denota que Lagomarsino podría tener la capacidad y los contactos necesarios como para, cuanto menos, intentar ocultar prueba determinante para esta investigación", indicó el fiscal Taiano