Catt Gallinger es modelo y tenía la ilusión de tener un ojo color violeta. Por eso, decidió hacerse un tatuaje ocular, pero no todo salió como ella esperaba.
La modelo de Canadá, pasó las últimas semanas documentando en carne propia y para sus seguidores los severos daños que le produjo el tatuaje ocular, donde casi pierde la visión.
El proceso para hacer el tatuaje consiste en la inyección de tinta colorante en la membrana ocular. Sin embargo, la visión de la joven de 24 años quedó severamente dañada.