Hallaron muerta a Anahí Benítez en una reserva de Lomas de Zamora

Se encontraba desaparecida desde el sábado último. Los padres confirmaron que el cuerpo encontrado pertenecía a la joven.

La adolescente Anahí Benítez, quien se encontraba desaparecida desde el sábado último en la localidad bonaerense de Parque Barón, fue hallada este viernes asesinada y enterrada en la Reserva Natural Municipal Santa Catalina, del partido de Lomas de Zamora, a pocas cuadras de su casa.

El cadáver fue hallado este mediodía en ese predio de 730 hectáreas que la Policía rastrillaba desde el jueves con perros adiestrados en busca de Anahí (16), ya que esa zona fue donde se activó la antena de su celular el día que fue vista por última vez.

El cuerpo era sometido a la autopsia correspondiente, pero de acuerdo con el primer informe forense el cuerpo presenta lesiones cortantes y contusas en el rostro y el resto de la cabeza, en tanto que tiene una data de muerte de entre 24 y 48 horas, pero haber permanecido bajo tierra a bajas temperaturas pudo haber retrasado el proceso de putrefacción.

Si bien todavía no se pudieron determinar signos de violencia sexual, el hecho de que la joven estuviera desnuda y se encontraran prendas femeninas en otros sitios del predio, hacen presumir a los investigadores que fue víctima de una violación.

En principio, había dudas sobre si se trataba de la joven, pero había otras dos características que coincidían con las de Anahí: el cadáver era el de una joven de 1,70 metros y tenía dos aros colocados como los que usaba la chica.

Posteriormente, la confirmación llegó con la identificación del cuerpo por parte de la madre, Silvia Pérez, y de su hermano, Adrián Benítez, y de la toma de las huellas dactilares a la víctima por parte de los peritos en la morgue judicial de Lomas de Zamora, indicó a la agencia Télam una fuente de la investigación.

Los voceros dijeron que los policías que rastrillaban la zona encontraron el cuerpo porque les llamó la atención un montículo de tierra removida desde hace algunos días y sin pasto, ubicado a unos 200 metros de la estación Santa Catalina del tren Roca que hay en la reserva.

Al aproximarse con los perros al lugar, detectaron la existencia de un cadáver enterrado en un pozo que presumiblemente se cavó con una pala o una herramienta con el propósito de ocultarlo, añadieron las fuentes.