Cientos de personas aguardaban hoy en el aeropuerto de Bariloche para poder abordar un vuelo luego de que se fueran demorando y suspendiendo los arribos y partidas debido al temporal de nieve.
Las protestas y el nerviosismo de muchas personas se vieron agravados porque gran cantidad de afectados durmieron anoche en el lugar y tuvieron que acomodarse sin calefacción ni energía eléctrica. Además, hubo denuncias por los altos precios que se pretendía cobrar por alimentos y bebidas en el aeropuerto local.
En tanto, el intendente de Bariloche, Gustavo Gennuso, admitió esta tarde que habrá inconvenientes para el traslado de turistas por lo menos por otras 48 horas.