Coronavirus: el Gobierno descarta un brote interno pero extremó los controles

"Estamos en alerta, todo el mundo, porque es un tema de salud y hasta de defensa", dijo el ministro Ginés Gonzalez García.

Coronavirus: el Gobierno descarta un brote interno pero extremó los controles. (EFE)
Coronavirus: el Gobierno descarta un brote interno pero extremó los controles. (EFE)

El ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, aseguró este jueves que se extremaron los controles para evitar que el coronavirus, cuya aparición generó alarma a nivel mundial, ingrese a la Argentina y aclaró que "hasta ahora no tenemos ninguna posibilidad" de que se registren casos en el país salvo que sean importados.

"Estamos en alerta, todo el mundo, porque es un tema de salud y hasta de defensa", dijo el funcionario en declaraciones a radio La Red.

Sin embargo, cuando se le consultó si existía la posibilidad de que se produzcan casos en la Argentina, respondió: "Hasta ahora no tenemos ninguna posibilidad que no sea un caso importado. Lo que ha pasado, supuestamente, si se confirma lo de Brasil, es un caso que viajó desde la ciudad de China donde esto surgió".

González García explicó que se adoptaron las medidas de control como cada vez que "aparece un tipo de virus respiratorio grave", aunque remarcó que el coronavirus "aparentemente" no es tan letal "como el sars", que también se desató en China, en 2002 y se propagó por diferentes países.

"No tenemos ningún caso sospechoso, aunque estamos en máximo control", insistió.

Asimismo, el ministro reiteró que se está en estado de "máxima alerta epidemiológica" por el dengue. "Siempre preocupación por una cuestión que es endémica en toda la región y que tuvimos algunas cosas serias, en 2015 por ejemplo", explicó.

"Estamos intensificando todas las acciones. Estuve la semana pasada en Misiones y me junté con los cinco ministros de las provincias más vulnerables, más expuestas e intensificamos tanto las medidas comunitarias, que dependen de las personas, como las del Gobierno", detalló.

El avance del coronavirus en la región

La confirmación de un caso en los Estados Unidos y la aparición de otros posibles en México, Colombia y Brasil elevaron los niveles de alerta en la región sobre el nuevo brote de coronavirus, la más reciente amenaza virológica a nivel internacional y que amenaza con convertirse en una pandemia.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) no logró consensuar este miércoles si la actual manifestación debe o no ser declarada como una emergencia internacional, aunque el nuevo reto epidemiológico que ya se ha cobrado la vida de 17 personas en China.

La preocupación de las autoridades sanitarias americanas se hizo más que evidente cuando a principios de semana se informó en EE.UU. que un viajero que estuvo en la ciudad china de Wuhan, epicentro del brote, presentaba síntomas de neumonía.

Ya en Latinoamérica, uno de los puntos de vigilancia es el estado mexicano de Tamaulipas, donde un profesional de la salud comenzó a evidenciar sintomatología luego de regresar de un viaje a China.

El médico, adscrito al Instituto Politécnico Nacional (IPN), reportó que el 10 de enero llegó de China a Reynosa (capital de Tamaulipas) tras hacer escala en Ciudad de México.

Según confirmó a medios locales Gloria Molina, secretaria de Salud del estado mexicano, al médico ya se le ha hecho la prueba de detección, para descartar o afirmar la presencia del virus.

Una situación similar se vive en Colombia, donde se esperan los resultados de pruebas definitivas a un pasajero chino que arribó este miércoles a Bogotá proveniente de Turquía y las autoridades evalúan contactar a otros pasajeros que venían en el mismo vuelo para someterlas a revisiones médicas.

La "neumonía china" podría haber llegado también a Brasil, más exactamente a Belo Horizonte (estado de Minas Gerais), donde los encargados sanitarios están vigilando a una mujer de 35 años que estuvo hasta hace muy pocos días en Shanghái.

La paciente, aunque no presenta síntomas graves, fue remitida para evaluación al Hospital Eduardo Menezes de la ciudad brasileña, donde se encuentra en estado estable, consignó EFE.