El plan de Amado Boudou para frenar las causas por la corrupción K

El ex vicepresidente también se refirió a sus "sensaciones encontradas" tras el triunfo de Alberto Fernández en las elecciones presidenciales.

EFE/ Aitor Pereira
EFE/ Aitor Pereira

Los abogados defensores del exvicepresidente detenido Amado Boudou diseñan una nueva estrategia a partir de la victoria electoral de Alberto Fernández: el plan consiste en recurrir al Congreso de la Nación para que inste a la Corte Suprema de Justicia a intervenir en las causas contra exfuncionarios kirchneristas acusados por corrupción.

Según explicó el abogado de Boudou, el constitucionalista Eduardo Barcesat, esa estrategia tiene como objetivo conseguir un "declaración de ambas cámaras del Congreso de la Nación dirigiéndose a la Corte Suprema de Justicia para que instruya a los jueces para que haya un control de legalidad sobre las causas".

Eduardo Barcesat, el abogado de Amado Boudou. EFE/José Jácome
Eduardo Barcesat, el abogado de Amado Boudou. EFE/José Jácome

Explicó que la intención es que, a través del máximo tribunal de Justicia, los jueces que llevan adelante esas investigaciones reciban el siguiente mensaje: "Sabemos que han hecho trampa, le damos una oportunidad para deshacer los entuertos".

“Esta es la directiva que le imparte la cabeza del Poder Judicial en observancia a la ley más antigua de organización del Poder Judicial de la Nación, que establece que el deber de los jueces es asegurar la supremacía de la Constitución Nacional, aún por sobre los actos de los otros poderes, lo que podría significar que el primero y esta es la interpretación que queremos aportar, es que el primero revisar es precisamente el Poder Judicial de la Nación”, detalló el letrado.

Barcesat aseguró que esta voluntad "goza de amplio consenso entre los que han sido consultado", pero aclaró: "Queremos ver qué es lo que sucede cuando efectivamente el Congreso pueda abocarse".

El abogado opinó que este planteo tiene “más de audacia institucional” que la otra gestión que llevan adelante para que todos los abogados que defienden a exfuncionarios kirchneristas interpongan “el planteo de nulidad de cosa juzgada formal, írrita y fraudatoria”.

"Creo que sería un aporte pronto para la terminación de estas causas ficcionales", evaluó Barcesat en declaraciones a un programa en el que también participó Boudou mediante una comunicación telefónica desde la cárcel de Ezeiza.

El ex vicepresidente consideró que la nueva estrategia de defensa “sería una gran iniciativa” para superar “una situación tan injusta”. “Sería una cuestión institucional que pondría las cosas en blanco sobre negro”, agregó.

EFE/ Aitor Pereira
EFE/ Aitor Pereira

“Para mí esto no es una cuestión personal, yo puedo estar preso el tiempo que quieran, yo no quiero quedar bien con los poderosos, con los poderes fácticos, yo quiero quedar bien con mis compañeros y compañeras. Yo no tengo una desesperación por salir, salvo por estar con mis niños y mi compañera. El resto, yo tengo una responsabilidad política y la asumo plenamente, no me arrepiento de nada, ni de lo que hice no de lo que no hice, porque siempre fue a favor de las mayorías y para cuidar la institucionalidad verdadera”, desarrolló Boudou.

Seguido, aclaró que de ser efectiva esa estrategia, no tiene que permitir una “situación espejo con nadie” porque alertó: “Para mí (Mauricio) Macri es un ladrón y ninguno de mis compañeros son ladrones. Macri y su equipo”.

Con el triunfo del Alberto Fernández en las pasadas elecciones presidenciales, el Frente de Todos (FDT) ratificó su presencia en la Cámara de Diputados pero no consiguió la mayoría que sí tendrá en la Cámara alta frente al bloque de Juntos por el Cambio (JPC), que se convertirá a partir de diciembre en el principal espacio opositor.

Los números indican que, en Diputados, el FDT renovó 65 de 110 bancas y JPC 46 de 109. Y en el Senado, el FDT renovó 11 de 31 bancas y Juntos por el Cambio, 6 de 27.

REUTERS/Agustin Marcarian
REUTERS/Agustin Marcarian

Boudou confesó que la victoria electoral de Alberto Fernández le provocó una “mezcla de sensaciones” porque “por un lado, es mucho lo que está en juego en nuestra patria con la posibilidad de tener un gobierno que lleve adelante las expectativas de millones de argentinos que se han quedado sin trabajo, sin ingresos, con jubilaciones miserables”.

“Por otro lado, con la expectativa de que realmente el sistema de administración de leyes que hay en la Argentina ponga en su lugar a esta banda de ladrones que ha saqueado a la Argentina durante tantos años y que no se use como una teoría de los dos demonios sino simplemente decir las cosas como son: que acá hay un gobierno que abusó de los argentinos y que no sólo los estafó electoralmente sino que les robó a través del funcionamiento de los servicios públicos y del endeudamiento”, completó.

Boudou cumple una condena de 5 años y 7 meses de prisión por el delito de cohecho pasivo en concurso ideal con negociaciones incompatibles con la función pública, en el marco de la venta de la imprenta ex Ciccone Calcográfica.

Por la corresponsalía de Buenos Aires.