El comienzo del Superclásico por Copa Libertadores se retrasó alrededor de diez minutos por un hecho insólito: la presencia de demasiados "papelitos" en el campo de juego de Boca Juniors.
La voz del estadio ya había comenzado la cuenta regresiva para el inicio del juego. Sin embargo, tuvo que detener el conteo dos veces por pedido del árbitro, Wilton Pereira Sampaio, debido a la excesiva cantidad de papeles blancos que los hinchas del "Xeneize" habían lanzado al campo de juego durante la entrada de los jugadores.
Rápidamente, las redes sociales estallaron de memes y bromas en referencia al desopilante incidente, que dejó como protagonistas al personal de limpieza del campo y también a los organizadores del encuentro, que no pudieron prever el contratiempo.