Una taza de café al día puede prevenir el exceso de peso y la diabetes

La infusión puede estimular la "grasa marrón", encargada de controlar los niveles de azúcar y lípidos en la sangre. Los detalles del estudio.

Una taza de café al día puede prevenir el exceso de peso y la diabetes (Foto: ilustrativa/web)
Una taza de café al día puede prevenir el exceso de peso y la diabetes (Foto: ilustrativa/web)

Científicos de la Universidad de Nottingham, en Gran Bretaña, publicaron un estudio en la revista Scientific Reports donde revelan que tomar una taza de café al día puede estimular la grasa marrón, fundamental para prevenir la obesidad y la diabetes.

El tejido graso o adiposo tiene muchas funciones, amortigua zonas delicadas del cuerpo, acumula energía y regula la temperatura corporal. Esta última función la realiza la grasa marrón, la cual produce el 20% del calor corporal.

Las diferencias entre la grasa blanca y la marrón (Foto: web)
Las diferencias entre la grasa blanca y la marrón (Foto: web)

"La grasa marrón contiene más mitocondrias, las centrales de energía de la célula, lo que permite que queme combustible de manera más eficiente. La grasa marrón se activa en condiciones de frío y se quema para generar calor", resumió el artículo.

Michael Symonds, co-director del estudio, explicó sobre estas grasas que "aumentar su actividad mejora el control del azúcar y los niveles de lípidos en la sangre", pero agregó que "hasta ahora, nadie ha encontrado una forma aceptable de estimular su actividad en los seres humanos".

Una taza de café al día puede prevenir el exceso de peso y la diabetes (Foto: ilustrativa/web)
Una taza de café al día puede prevenir el exceso de peso y la diabetes (Foto: ilustrativa/web)

Sin embargo, este estudio demostró que "una taza de café puede tener un efecto directo en las funciones de la grasa marrón", aseguró Symonds. "Las implicaciones potenciales de nuestros resultados son bastante grandes, ya que tanto la obesidad como la diabetes son un importante problema de salud en todo el mundo", subrayó.

El equipo comenzó con una serie de estudios llevados a cabo en células madre para ver si la cafeína podía estimular la grasa parda. Una vez que encontraron la dosis correcta, pasaron a los humanos. Los investigadores emplearon una técnica de imagen térmica para rastrear las reservas de grasa marrón del cuerpo.

Los resultados fueron positivos: "Ahora debemos determinar si sólo la cafeína es la que actúa como estímulo, o si hay otro componente que ayude con la activación de la grasa marrón", concluyó Symonds.