Si bien es una de las mujeres más codiciadas del país, la China Suárez tiene los pies sobre la tierra y durante una de las última entrevistas que concedió hizo una sorprendente reflexión sobre su cuerpo, el cual muchas envidian.
Una de las protagonistas de "Argentina, tierra de amor y venganza" (El Trece) nunca pasó por un quirófano para hacerse cirugías estéticas y eso es lo que muchas mujeres valoran a la hora de opinar sobre ella.
"Sé que no tengo el culo perfecto, ni las tetas perfectas, ni las piernas perfectas, ni soy alta, pero soy feliz y me quiero mucho como soy. Ya no tengo la vara alta de querer ser perfecta. Soy natural y creo que eso es lo que valoran las mujeres", señaló en diálogo con revista Caras.
No obstante la China, madre de dos niñas a los 27 años -Rufina, con Nicolás Cabré, y Magnolia, fruto del amor con Benjamin Vicuña-, es consciente de que los embarazos dejan sus huellas.
"Siempre tuve las tetas medio caídas, desde antes de amamantar, no es algo que me genere incomodidad", contó en su momento, cuando enfrentó críticas desmedidas en redes sociales al respecto.
Y sobre la posibilidad a futuro de hacerse algún retoque estético, la China está orgullosa de no haberlo hecho hasta el momento pero tampoco lo descarta. “Por ahora no hay algo de mí que no me guste, pero si pasara eso me lo operaría sin ningún problema”, contestó sin vueltas.
